Todo sobre el Plan Condor. Bbcmundo.com
A comienzos de la década del 90 se descubren en Paraguay los documentos secretos de la policía política paraguaya.
Pero estos documentos, que ganaron el macabro nombre de "los archivos del terror", no sólo informaban del accionar de esa fuerza, sino que revelaban la coordinación de los gobiernos militares sudamericanos durante las décadas de 1970 y 1980 para perseguir a los opositores políticos.

El Holocausto silenciado. Aniversario de la masacre del pueblo armenio. Acciondigital
Entre 1915 y 1923, el Estado turco asesinó a más de un millón y medio de armenios, en lo que algunos historiadores consideran el primer genocidio del siglo XX. En el caso del genocidio armenio, participaron amplios sectores de las clases bajas y populares, vecinos, amigos y conocidos de las víctimas. En el momento que comenzó el proceso, algunos pocos ayudaron a los armenios por razones personales. La gran mayoría del pueblo turco, incluyendo a los kurdos, participaron tanto de las masacres como de la apropiación de casas y tierras". Es un genocidio permanente, porque es la negación de los armenios. Es, sistemáticamente, borrar cualquier rastro, cualquier monumento, cualquier ruina.

Masacre indígena de Napalpí: 80 años de impunidad. Indymedia
A la mañana del 19 de julio, 130 policías y algunos civiles partieron desde la localidad de Quitilipi hasta Napalpí. Después de 45 minutos de disparar los Winchester y Máuser a todo lo que se movía, hubo silencio y humareda de los fusiles. Los heridos -fueran hombres, mujeres o niños- fueron asesinados a machetazos. El periódico Heraldo del Norte recordó, a finales de la década del 20, el hecho: "Como a las nueve, y sin que los inocentes indígenas hicieran un sólo disparo, hicieron repetidas descargas cerradas y enseguida, en medio del pánico de los indios (más mujeres y niños que hombres), atacaron. Se produjo entonces la más cobarde y feroz carnicería, degollando a los heridos sin respetar sexo ni edad".

A 22 años del golpe. Madres.org
Las Madres de Plaza de Mayo no olvidamos que los políticos, los empresarios, la iglesia y los burócratas sindicales fueron a golpear las puertas de los cuarteles para pedir un golpe de estado.
Nuestros hijos sabían que tenemos la obligación de desobedecer las leyes injustas. Los pueblos tenemos el inalienable derecho de resistir a la opresión. En medio de la corrupción, la explotación y el hambre, lo ético es ser muy firmes de una vez por todas para curar la violencia que ejercen las minorías contra el pueblo.

El Golpe Militar del 24 de marzo de 1976. Rebelion.org
Se interrumpieron las libertades públicas, fueron disueltos el Congreso, la Corte Suprema de Justicia y los partidos políticos, quedó sin efecto la Constitución Nacional, se dispuso el estado de sitio, se intervinieron los medios de comunicación y se reglamentó la pena de muerte. Quedaba legalizado el sistema represivo y constituido el terrorismo de Estado. Las fuerzas del mal quedaban al mando del país.

Ley de Punto Final. Telam
La norma establecía claramente que ante una orden de detención o de prisión preventiva para militares, policías u otros agentes de seguridad eran sus superiores los que debían hacerla cumplir.

Ley de Obediencia Debida. Telam
La ley dejaba impunes a oficiales jefes, oficiales subalternos, suboficiales y personal de tropa de las fuerzas armadas, de seguridad, policiales y penitenciarias por la aplicación del principio de la obediencia debida.

Los indultos dictados por Menem. Telam
Menem firmó ese 30 de octubre de 1989 cinco decretos que beneficiaron a 220 militares y 70 civiles, entre ellos el ex dictador Leopoldo Galtieri y demás responsables de la guerra de Malvinas condenados por sus propios pares.
Un año y dos meses después, el Día de los Santos Inocentes, el 28 de diciembre de 1990, Menem eligió su ciudad natal, Anillaco (La Rioja), para anunciar una segunda tanda de indultos, más cuestionados aún.

El general y las madres. Accion Digital
"Ahí dijimos ‘de aquí no nos vamos más hasta que nos den una respuesta, de esta plaza no nos van a mover hasta que nos digan la verdad’". La esperanza estaba en la Plaza. Y allí se quedarían. Y se quedaron. Y allí siguen las Madres hoy. Y el general Harguindeguy está preso.

Durante los años setenta, la población pobre en América Latina se había reducido porcentualmente del 47% al 40%, aumentando sin embargo en números absolutos de 130 a 144 millones. Entre 1980 y 1986, en poco más de la mitad de ese tiempo, el porcentaje volvió a ascender al 43% y el número absoluto, de 144 a 175 millones, para pasar en 1996 a 210 millones de habitantes. Ese aumento de la cantidad de pobres, significa un retroceso que duplica todo el avance obtenido en diez años anteriores de fuerte crecimiento económico.