Autor: Andy Robinson.

El éxito de "The apprentice" ("El aprendiz"), el nuevo "reality show" del canal de aire norteamericano NBC, cuyo protagonista es el magnate inmobiliario Donald Trump, refleja el ciclo económico que viven los Estados Unidos. Es que, aunque sin generar empleo, la recuperación económica que impulsó la suba de la bolsa y empujó el sector inmobiliario es el trasfondo del programa en el que, o el participante acierta con el modelo para llevar a cabo determinado negocio, o Trump lo manda a la calle. Heidi Bressler fue la última concursante que oyó la frase "You´re fired!" ("¡Estás despedida!"), máximo símbolo del programa "más adictivo de la televisión norteamericana actual", según lo calificó la revista "Newsweek". "Heidi, no tenés las cualidades de liderazgo para gestionar ninguna de mis empresas. Tenés que irte", le dijo Trump. Los ganadores, en cambio, fueron invitados a dar un paseo por el río Hudson de Nueva York, EE.UU., a bordo del espectacular yate del empresario. Ahora sólo quedan 7 de los 16 aspirantes al premio, que no es otra cosa que un año de aprendizaje al frente de una de las empresas de Trump, cobrando un salario de 250.000 dólares anuales.

El planteo y, sobre todo, el premio, ya arrastraron más de 18 millones de telespectadores, que disfrutan como locos del espectáculo de ver a jóvenes como Heidi luchando a brazo partido por un puesto de trabajo (más de 200 mil postulantes solicitaron participar en el programa). Trump es el ejemplo del empresario estadounidense que sabe adaptarse a los vaivenes, estilo montaña rusa, que impone el volátil ciclo inmobiliario.

Tras convertirse en uno de los símbolos del "boom" de los años 80, "la década de los excesos" plasmada en las ostentosas Trump Towers de Manhattan, la recesión que vino inmediatamente después provocó su estrepitosa caída. Finalmente, Trump evitó la bancarrota por un pelo, aunque acumuló deudas por 900 millones de dólares. Sin embargo, el magnate se recuperó y ahora, en toda la zona oeste de Manhattan, brotan como hongos sus nuevas torres Trump, para colmo, justo en un momento en el que los precios se están disparando. Por lo tanto, ha vuelto a ser un multimillonario de los que aparecen en la revista "Forbes", esta vez, con un patrimonio que la revista calcula en 2.500 millones de dólares, aunque Donald jura y perjura que tiene el doble de lo que dicen que tiene.

Esta capacidad de desafiar los avatares del ciclo económico es muy atractiva para los estadounidenses. Pero hay una faceta más perversa en el éxito de "The apprentice": mientras los especuladores como Trump vuelven a vivir años de oro, para el común de la gente, el miedo al desempleo sigue sin esfumarse. El índice de creación de puestos de trabajo es el más débil de la historia. De ahí, tal vez, esa especie de atracción fatal masoquista que despierta la frase "You´re fired!", con la que Trump sentencia el final de cada capítulo.

No se puede obviar, tampoco, que la "erótica del poder" también suma televidentes al show. A los 58 años y habiendo sido padre de tres hijos, hoy, Trump está sentimentalmente relacionado con la ex modelo Melanie Knauss, la última de una serie de amantes que llenaron los titulares de la prensa del corazón neoyorquina. No en vano varias chicas de las que participan en de "The apprentice" fueron acusadas de tratar de aprovechar las debilidades de Donald...

Fuente: La Vanguardia, España