QUEDAN SOLO 38.000 CHIMPANCES EN EL MUNDO

GLAND, SUIZA.. EFE.

La criatura más similar al hombre está en grave peligro de extinción

Científicos, ecologistas y conservacionistas de todo el mundo advierten que el chimpancé se encuentra en peligro de extinción y preparan un plan de acción, junto a la World Conservation Union.

El chimpancé es la especie que más se parece al ser humano y, por ese motivo, puede proporcionar datos muy importantes a la ciencia sobre la evolución. La denuncia sobre el peligro que corren estos animales la inició la famosa etóloga británica Jane Goodall (bióloga especializada en el comportamiento de los animales).

El proyecto para intentar revertir este proceso de desaparición está a cargo del Centro para la Ciencia Aplicada de la Biodiversidad de Conservation International y del Grupo de Especialistas en Primates de la Comisión para la Supervivencia de las Especies.

"Sería trágico no impedir su extinción", declaró Goodall, ganadora del premio Príncipe de Asturias en la categoría Investigación Científica por su publicación titulada "Chimpancés del Africa Occidental: examen de situación y plan de acción para su conservación".

Los investigadores estiman que, en el mundo, hay 38.000 chimpancés cuyo nombre científico es pan trogloytes verus. El peligro de este tipo de chimpancé es el mismo que sufre el chimpancé nigeriano. Como ejemplo, cuentan que ya desapareció de dos países africanos y podría dejar de existir en otros cinco, donde viven menos de mil individuos.

Como parte del plan para cuidar esta especie, los científicos quieren lograr una mayor colaboración entre policía y funcionarios de aduanas, en las fronteras de los países donde viven los chimpancés. A la vez destacan la importancia de involucrar a los gobiernos y a los nativos en los esfuerzos por su conservación.

En la mayoría de los países, entre un 45 y un 81 por ciento de la población de estos animales vive fuera de las áreas protegidas. Por este motivo, los conservacionistas exigen que se logre ampliar estas áreas y así proveer la infraestructura adecuada para cuidarlos.

Preocupados por el peligro de los chimpancés, en noviembre pasado, la UNESCO reunió en París a numerosos especialistas y representantes gubernamentales para crear un plan de supervivencia. Allí se difundió que dos de los países africanos donde estos animales corren mayor peligro son Ghana y Guinea Bissau. La población, en cada uno, es de 400 y 200 ejemplares, respectivamente. A la vez, se informó que en lugares como Benín, Gambia y Togo, los chimpancés ya han desaparecido.

El riesgo para estos animales es, básicamente, responsabilidad del hombre. Sus mayores problemáticas son el crecimiento demográfico que implica una reducción del hábitat natural de estas especies, las guerras civiles, la caza furtiva, el comercio de animales vivos y, sobre todo, la destrucción de los bosques.

Según un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, titulado "The Great Apes — The road ahead" (Los grandes simios — El camino a seguir), si persiste el ritmo actual de construcción de carreteras, instalaciones mineras y otras infraestructuras, en el año 2030 sólo quedará preservado poco menos del 10 por ciento del hábitat de los grandes simios de Africa.

El chimpancé es una de las especies más estudiadas genéticamente por su similitud con el hombre. Científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad del estado de Wayne, en Detroit, Estados Unidos, realizaron una comparación genética. La conclusión es que el código genético humano es en un 99,4 por ciento igual al de los chimpancés.

A partir de estos datos, proponen que los chimpancés, y otros simios similares, sean catalogados en el género homo, el grupo taxonómico al que pertenece el hombre, dentro del reino animal.

"Hemos demostrado que los humanos y los chimpancés son más parecidos entre ellos que cualquier otra especie dentro de la familia de los monos", explicó Derek Wildman, miembro del Proceedings of the National Academy of Sciences y estudioso de los chimpancés.

El chimpancé es una especie natural del continente africano. Su distribución comprende, básicamente, Africa ecuatorial, desde Guinea hasta Tanzania. Cuando puede elegir libremente, se inclina por las selvas lluviosas, los bosques montañosos y las sabanas. Viven en grupos o comunidades, y las hembras usualmente tienen un sólo hijo en cada embarazo y esto se repite cada 5 o 6 años. La longevidad promedio es de 50 años en la naturaleza.

Fuente: Clarin, Sociedad Miércoles 18 de febrero de 2004