Algo suena mal

En la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC), algo suena mal. Cada año ingresan a sus arcas entre 80 y 100 millones de pesos. Sin embargo, muchos músicos se quejan de que parte de esa plata no llega a quienes la compusieron.
El Directorio está integrado por Ariel Ramírez, su presidente; Atilio Stampone, el Vicepresidente; Paz Martínez, María Elena Walsh, Eduardo Falú, entre otros.
Es decir, está integrado por artistas respetados y reconocidos. Cuando un tema es pasado en la televisión o en la radio, se anota en una planilla y SADAIC cobra por los derechos de autor. Lo mismo pasa en las fiestas privadas, en los boliches o en los bares. Puntodoc estuvo por Palermo Viejo, una típica zona porteña de bares, donde todos tienen la obligación de pagar SADAIC por pasar música funcional, presentar bandas que tocan en vivo o, simplemente por tener un televisor encendido. La tarifa del impuesto está relacionada con la cantidad de mesas y cubiertos del lugar.
El dinero recaudado deber ser repartido entre autores y compositores. Pero las cosas no son muy transparentes. Según el músico Gustavo Correra, quién es socio de SADAIC: "Hay un pozo ciego de muchísimo dinero que SADAIC cobra en nombre de gente que no es representada, que todavía no fue a hacerse socio, de discotecas, de radios". Por otra parte, el autor y compositor Orlando Vera aclara que "Hay un decreto regulatorio de ley, que dice que el gasto administrativo no puede superar el 30%. El balance del 2000 fue del 42%, se recaudaron 79 millones y el gasto administrativo fue de 27. Al año siguiente, en 2001, el gasto administrativo también fue del 38%".
Ante la ineficiencia, los directivos no pueden poner como excusa la falta de personal ya que SADAIC tiene más empleados que socios activos. Es decir que en el pago de sueldos se invierten altas sumas de dinero así como también en las indemnizaciones.
Además, en los balances de SADAIC de los últimos años, aparecen varios ítems que son muy sugestivos. Uno de ellos es el de "pagos a socios extranjeros". Este tipo de irregularidades, llegaron a la justicia: "Están procesados tres miembros del Directorio, el vicepresindente Atilio Stampone, el presidente Ariel Ramírez y el presidente de la junta consultiva César Isella. Hasta ahora tienen sentencia firme por supuesto depósito de dinero en las Islas Caimán", afirma el autor y compositor, Orlando Vera.
En los tribunales porteños hay una causa sobre defraudación. En ella se intenta determinar cómo se administró la plata "porque cabría la posibilidad que la misma fuera utilizada para cubrir gastos personales realizados por los imputados".

En Argentina SADAIC tiene el monopolio sobre la recaudación de los derechos de autor. En el exterior la situación es diferente. Por eso hay artistas que tomaron una decisión que pone en juego el patrimonio musical. En este momento, la sociedad española, la ESGAE, puso una oficina frente a la sociedad de autores de SADAIC, entonces se están yendo muchos autores y compositores", explica el cantautor Antonio Tarrago Ross.

Entre enero y diciembre de 2001 Omar Martín fue auditor de SADAIC. En ese momento no sólo encontró "desprolijidades" en los fondos de la institución. También llegó a una conclusión: "Estas desprolijidades se deben tal vez a la poca o escasa participación de los socios. Pocos tienen la posibilidad de ser socios activos y la mayoría de esos socios activos directamente no participan en la vida societaria".

Las autoridades de SADAIC están en sus cargos desde hace décadas. Ramírez, por ejemplo, desde 1970.
Hay quienes dicen que esa perpetuidad en los cargos es consecuencia de prácticas electorales poco claras. El Autor y compositor, Carlos "Peteco" Carabajal, da un ejemplo en relación a las reiteradas irregularidades: "En las asambleas traen a los que viven en las provincias. Ese día aparece gente que después no siguen bien de cerca lo que pasa con SADAIC. Pero aparecen en la asamblea porque les han pagado el pasaje y porque vienen y están un día en un hotel, y se llevan 200 pesos. Y eso les sirve como para conseguir aprobación en la asamblea".

Fuente: Puntodoc/doc